Asimismo, la editorial se encargó de proporcionar a muchas librerías un reloj de cuenta regresiva de 16 días, en referencia al período que faltaba para el lanzamiento de medianoche de la obra y del comienzo de una serie de festividades por tal acontecimiento. Se organizó un concurso en el que 70 jóvenes tuvieron la posibilidad de ser los primeros en conseguir el libro en un evento dirigido por Rowling -quien además autografió sus ejemplares- al que acudieron más de 2000 aficionados; esto en Edimburgo, Escocia, donde el castillo principal de la ciudad fue decorado para lucir similar al colegio Hogwarts, escenario principal del universo de Harry Potter, a lo largo de toda una semana.